En ocasiones, nuestros perros causan daños de los que tenemos que responder. Así lo ha reconocido nuestros tribunales en sentencias relativas a accidentes de tráfico provocados a consecuencia de la incursión del perro en la vía pública, respecto a ataques de sus perros a personas con independencia de que sea en el interior de una propiedad privada o por molestias sufridas a los vecinos ante los ladridos de los animales.
A consecuencia de esto, es recomendable asegurar al animal, siendo importante tener presente que la cobertura no debe quedar limitada al tomador del seguro o al propietario de animal, sino a todo aquel que conviviendo en el hogar comparta su cuidado ya que los poseedores del animal en el momento del suceso son responsables.
En cualquier caso, sí que existe obligación de asegurar a aquellos que se traten de perros potencialmente peligrosos como por ejemplo, los pertenecientes a las siguientes razas: Pit Bull Terrier, Staffordshire Bull Terrier, American Staffodshire Terrier o Rottweiler. Hay otros que por sus características físicas también deben ser asegurados, por lo que recomendamos que, ante la duda acuda a un profesional a consultarlo.
